martes, 21 de octubre de 2014

domingo, 19 de octubre de 2014




El Guardián del Hielo

Y coincidimos en el terral
el heladero con su carretilla averiada
y yo
que corría tras los pájaros huidos del fuego
de la zafra.
También coincidió el sol.
En esa situación cómo negarse a un favor llano:
el heladero me pidió cuidar su efímero hielo.
Oh cuidar lo fugaz bajo el sol...
El hielo empezó a derretirse
bajo mi sombra, tan desesperada
como inútil.
Diluyéndose
dibujaba seres esbeltos y primordiales
que sólo un instante tenían firmeza
de cristal de cuarzo
y enseguida eran formas puras
como de montaña o planeta
que se devasta.
No se puede amar lo que tan rápido fuga.
Ama rápido, me dijo el sol.
Y así aprendí, en su ardiente y perverso reino,
a cumplir con la vida:
yo soy el guardián del hielo.

José Watanabe

martes, 14 de octubre de 2014



no quiero ser parche emocional de nadie,
(ni espacio de refugio)
mi misión es ser, no entretener



la acuarela se hace un río y una ola, también un pequeño viento,
y puff, ya está
un cuento


=)

sábado, 11 de octubre de 2014

párvulo de los 11


(foto de hace un año, párvulo distraído)


"...es el costo de la reflexión,del aprendizaje..." Me repetía en los días de tormenta.
Hace un año ya de los primeros días con veintitrés. Veinticuatro hoy. La ignorancia del devenir, los vientos en contra, las situaciones incómodas, y la historia sincerada, puntos precisos en el territorio plástico de este intervalo de hechos al cual represento. Una extensión propia de soberanía personal. La resistencia a los hechos, las heridas y cicatrices, solo gajes del oficio de crecer.  
Hoy prefiero bailar con el fuego.


flores?
sí, girasoles por favor
=)

lunes, 6 de octubre de 2014



a la mierda la familia....
cuantas veces he estado herido de muerte, y en caso la bruma acaparó los poros de este músculo resonante, jamás me punzaron como ahora.
como ahora
ahora
ahora?
nunca he tenido las ganas de partirle la cara a alguien como en este momento, de embestirlo a llantos, de dejarlo en el suelo...avergonzado..
y eso no me gusta, pero...


vomito como ráfagas de viento aquellas estrellas con las que nací, a las que creí...
una por una, pasando por la garganta, cortando y ensangrentando a esta roca llena de flores.
y este corazón naranja, avejentado...
y este naranja avejentado...
envenenado.da,nñafdnb {ol fv{ao´nf{alodnfma{pdnia{pdhnia{pinaksdj´{adjma{fjmnaFODSLfmj aolfma]m











carajo, la familia



jueves, 2 de octubre de 2014

zzzueño(s)




Bajo en paseo colón, en un microbus adherido a una ruta lineal que cruza un ovalito simpaticón lleno de tráfico. Me transporta en quince minutos mientras leo algo y me pierdo con los audífonos....
entro en aquel parque de las pinturas de Seurat y no puedo creer que así este yendo a trabajar.


estoy en el lugar que quiero, mas que un trabajo, es un servicio. Data revoloteando como mariposas, análisis de patrones, de tendencias, indices de desigualdad y pobreza, criminalidad, educación, salud, transporte, flujos, gente caminando o en bicicleta, puntos relacionados unos con otros, en una especie de organismo vivo, moviéndose, latiendo, sintiendo(!). Y yo tan calladito, impresionado, sobrio, procesando información, diagnosticando problemas, o mostrando simplemente lo que aquellos gráficos en bruto dicen de forma misteriosa. Y entonces todo lo que leí, escuche, o asimile alguna vez, empieza a tener sentido.    La ciudad.     ( nono no como concepto abstracto, sino entendiendo la responsabilidad que merece)

Probablemente sea la emoción de los primeros días.
o no.

a.p.