miércoles, 15 de enero de 2014

sideralidades perdidas


usos derivados, en la agenda a la que me trato de acostumbrar... creo ...no sirve.






mañana viajaré...
 no sé qué esperar, no sé qué encontrarme...
mi actitud, un tanto nihilista, me hace generar dudas, cuestionamientos previos... pero si no me dejo sorprender, tal vez el análisis posterior pueda ser prejuicioso...y no lo disfrute.
 No quiero eso, ya no más. se acabó.


Con la libertad del viajero,
tan solo disfrutar en este reino la dotación de belleza, tal cual...natural...
tal vez... los románticos sepan un poco de eso.
mirar la naturaleza y reconocerse, y al verse evidenciar que somos partes de todo un cosmos más grande, evidentemente, que nuestra insignificante existencia.


tal vez los románticos... o tal vez... los propios ashaninkas 
las geografías se diversifican tanto que me resulta un pequeño enigma constatar lo que tengo en la cabeza.
/los tiempos mentales absurdos hacen que (je) no termine de empacar.../


dicen que al lugar donde voy... la luz eléctrica no ha llegado,
pequeña gran excusa para no distraerme, o por el contrario razón poderosa para hacerlo.
que el cielo se pone azul, que el territorio no genera la aglomeración excesiva de nubes.
y por ende, y desponjandome de cualquier término que pudiese ser técnico
podré ver las estrellas.


yo sé, yo sé, esa no es la finalidad de todo esto...pero...
recuerdo que las disfrutaba.
desde pequeño.



los ashaninkas...
...será verdad?




los ashaninkas, la incipiencia del termino "ciudad"
no existe...no importa....lo suyo es un amor al territorio.... me pregunto si las leyes contemplan y respetan las diferentes cosmovisiones  y maneras qué hay de entender una misma palabra...territorio
 ¿En base a qué se adopta el termino beneficio en todo caso?cuando el territorio de por sí es ya no solo su beneficio, sino su misión. Diez por ciento de su población ha muerto victima de conflictos sociales, defendiendo lo que es suyo.
es hasta poético...
pero es real.


me fuí
=)

martes, 14 de enero de 2014

EL ORDEN NO ES UN SISTEMA IMPOSITIVO, ES UN CONCILIO NECESARIO.

jueves, 9 de enero de 2014

“Chichapolis” Choleado lo colonizado, intervenir lo concebido.


Burga, arquitecto conocido por su relación con los materiales tradicionales, exponía su intervención en la arquitectura chicha. Su respuesta proyectual, una pieza arquitectónica que lo único que sabía hacer era repetir y parecerse a lo que de manera natural era “Chicha”. Su visión de intervenir no terminaba de ser más que superficial y figurativa. La carencia de reflexión era evidente.

Pero lo chicha no es eso, no para mí, una intervención así carece del entendimiento  profundo de una circunstancia. El tema de la chicha pasa por reconocerla realmente como cultura. Transgresora, ambulante e informal. La crítica profesional, o el “gusto” estético especializado sobre la misma es irrelevante. Su entendimiento pasa por saberla producto de circunstancias, condiciones y cambios a nivel social, económico, histórico, territorial y físico. Lo chicha en la arquitectura es un organismo vivo, espontaneo, regido y orientado al gusto del habitante, de las cotidianidades y necesidades particulares que pueden, como no, ser colectivas. Es ahí donde está la clave, la concepción de la arquitectura de este género, en el individuo, en la familia y en los cambios que han tenido estos a lo largo de su historia. Desde que el migrante abandonó su ciudad de origen, las relaciones y dinámicas sociales en las que convivía y su entorno geográfico y urbano natal para “colonizar” un territorio llamado capital, un desierto inhóspito que los aborrecía, los sentía inferiores y despreciables, pero que hoy los necesita. El progreso de si mismos evidenciaba el desarrollo de sus viviendas. El sueño de la casa de ladrillo daba un mensaje de querer ser algo que no habían sido nunca, pero para efectos social-urbanos tenían y querían serlo.No hay dudas que en el ámbito arquitectónico chicha existen ambigüedades. Preexistencia a partir de costumbres heredadas y existencias nuevas a partir de costumbres adquiridas. Ser o no ser, o tal vez ser otra cosa y no a la vez. Lo chicha quiere ser todo y no es nada de lo que pretende, es algo nuevo. Entendido así y considerando su espontaneidad ¿Cómo un arquitecto interviene en contexto que le es radicalmente diferente al que está acostumbrado, una ciudad de la que irónicamente jamás ha sido parte? Habiendo pasado aproximadamente 60 años desde sus inicios, el profesional de arquitectura nunca fue necesario, su colaboración ha sido ínfima o casi nula. Hoy esa ciudad rebelde es el 70% de Lima. Y el Arquitecto aún sigue no estando. Pero tranquilo, que no seas necesario no quiere decir que seas inútil. No. No eres fundamental para concebir esta ciudad, pero eres importante para mejorarla. Está en la naturaleza de todo ser humano mejorar siempre. Mejorar sus condiciones de vida, su ciudad y lo que la compone, llegando hasta su unidad básica, la casa.

Bien, mejorar sí, pero en concreto ¿Cómo se adecua un arquitecto a una arquitectura que no está hecha por un profesional como él, una arquitectura que se mueve, que es orgánica en el sentido de su progresión? ¿Cómo intervenir en esta diversidad de expresiones, de habitares, de lenguajes? ¿Son los arquetipos de Aldo Rossi la respuesta? ¿O un engaño superfluo en este entorno cultural-urbano diferente? ¿O acaso tiene que ver en el entendimiento de su génesis, el habitante?



Francois Jacob, biólogo dice que “La diversidad está en la raíz de la mima biología, los genes” ¿Cuáles son los genes de esta arquitectura diversa entonces? ¿La madre sanguínea y el padre adoptivo de este organismo urbano y arquitectónico? ¿Dónde se inicia, donde está y hacía donde va el individuo, la familia y la ciudad? Son preguntas que terminan siendo fundamentales para su análisis y posterior proyección.

La estética de la expresión termina siendo anecdótica. Si la cáscara final del producto va a ser reacomodada por el usuario. ¿Por qué no dejar la libertad plena de la expresión al mismo? “Que se vea como realmente él quiere que sea”.  Nosotros, en cambio, preocuparnos por aquellos aspectos esenciales que harán la diferencia ahora y a través del tiempo (un estudio estructural eficiente, una modulación espacial que estudie las dinámicas sociales y el crecimiento familiar a través del tiempo, demandas del propietario, o así parezca etéreo… sus sueños, no se trata necesariamente de estandarizar, pero siempre hay una lógica hasta en lo natural). Nunca es demasiado tarde.

Jorgesaúl.